jueves, 8 de octubre de 2009

PELÉ: Hombre, Mito y Leyenda

No es gratuito que el fútbol sea considerado como el deporte más hermoso del mundo si tomamos en consideración que se trata del único deporte en el planeta que llega a todos los rincones en los que el hombre ha puesto pie, sin que la edad, la raza, la religión o las condiciones sociales sean limitantes para que pueda ser practicado.

Lo anterior se confirma al ver que un humilde joven nacido en Tres Corazones, Brasil, se convirtió en el máximo exponente del balompié.

El 23 de octubre de 1940 vio por primera vez la luz Edson Arantes do Nacimento, mejor conocido en el orbe como Pelé. Hijo del ex futbolista Dondinho y Maria Celeste Arantes, Pelé vivió sus primeros años en Baurú, donde las condiciones económicas lo llevaron a tener varias carencias pero las mismas terminaron siendo la fuerte que le llevaron a ser el mejor amigo que ha tenido el balón en sus casi 153 años de existencia.

Desde una joven edad militó en las fuerzas inferiores del Santos brasileño en el que tuvo que trabajar intensamente su complexión física para poder lograr el profesionalismo. Así las cosas, el 7 de septiembre de 1956 a los 15 años de edad debutó profesionalmente y lo hizo anotándole su primer gol al Cubatao.

Sus brillantes actuaciones lo llevaron a la selección verde-amarella a tan sólo un año de haber debutado, pero no sus trascendencia mundial no llegaría hasta la máxima justa futbolística celebrada en Suecia en 1958. En el mundial Pelé no inició como titular en los primeros dos partidos y ante la insistencia de su compañero en el Santos, Didí, Garrincha y él saltaron al campo para jugarse el pase ante la U.R.S.S. de Lev Yashin para iniciar así el camino a la gloria del ahora pentacampeón mundial. En las fases finales Pelé fue determinante para ganar 5-2 a Gales en cuartos de final, 4-3 a la Francia de Just Fontaine y Raymond Kopa en la semifinal anotando además el gol del triunfo y 5-2 con una tripleta al anfitrión Suecia, logrando así lo que ninguna otra selección ha logrado en su historia que es lograr el campeonato mundial fuera de su continente (lográndolo además de en Europa en Asia).

En las siguientes dos justas mundialistas Pelé no tuvo la suerte de Suecia ya que en ambos fue lesionado en la fase de grupos; su selección logró el bicampeonato en Chile y fue eliminada en la fase de grupos de Inglaterra 1966. Tras dichos trágicos episodios decidió retirarse de su selección, sin embargo la historia tenía preparada la máxima gloria jamás alcanzada por un futbolista por delante.

Para 1970 un Brasil renovado con jóvenes estrellas se preparaba para competir en el mundial a ser celebrado en México, sin embargo faltaba la cereza del pastel, regresar a Pelé a la selección. La tarea fue alcanzada por el entonces dirigente de la Federación Deportiva Brasileña, Joao Havelange y así Brasil logró conjuntar al mejor equipo que los aficionados al deporte del hombre jamás hayan visto, con monstruos de la talla de Rivelino, Tostao, Carlos Alberto, Gerson, Jairzinho y Félix. Inglaterra parece haber sido el único equipo en haber hecho suspirar al equipo comandado desde el área técnica por Mario “El Lobo” Zagallo –campeón en los primeros dos mundiales alcanzados por la canarinha- y ejecutando sus comandos por el jugador del Santos. Así, Brasil alcanzó su tercera copa en 12 años, haciéndolos acreedores a poseer en definitiva de la Copa Jules Rimet y de recibir el calificativo del Scratch du Oro. Tras este logro Pelé se retiró de la selección.

En el Santos F.C. no fueron menores los logros del mejor futbolista de todos los tiempos, fue el primer y único jugador en alcanzar todos los títulos alcanzables a nivel club, Campeonatos Locales, Campeonatos Paulistas, Copa Libertadores y Copa Intercontinental. Su desempeño fue tan elevado en el fútbol local que en sesión extraordinaria del Congreso de Brasil se le nombró patrimonio nacional, determinando así que no pudiera salir a jugar a un fútbol diferente del brasileño.

Tras haberse retirado por dos años, Pelé regresó a la actividad profesional con el proyecto de la primera liga de fútbol de los Estados Unidos, jugando para el New York Cosmos junto al káiser Franz Beckenbauer por dos años para así poner fin en definitiva a su carrera como jugador.

Después del retiro Pelé se ha mantenido unido al fútbol y ha aprovechado su estatus de figura internacional para promover el fútbol en el mundo, alcanzar causas benéficas y lograr metas para su país como ser la sede del Mundial de Fútbol en 2014 y los Juegos Olímpicos de Río en 2016.

Además de los galardones mencionados anteriormente fue nombrado el mejor jugador de fútbol de todos los tiempos por la Federación Internacional de Historia y Estadística del Fútbol, dependiente de F.I.F.A., es el máximo goleador de todos los tiempos con 1282 goles en 1366 partidos, su estilo de juego promovió dos cambios a las reglas del fútbol para mejorar el deporte y es considerado como el máximo Atleta del Siglo XX por el Comité Olímpico Internacional.

Recuerden a O’Rei, que se salve O’rei, Viva O’Rei.

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